Decir adiós es un asunto existencial de seres humanos tan movilizador como el miedo a la soledad.
A pesar de los sentimientos que acompañan a las despedidas (tristeza, incertidumbre, frustración, etc.), es necesario transitarlos gestionándolos saludablemente.
El sentido del adiós es recordar que todo tiene un final, para volver a comenzar. Seguimos en conexión con el placer y la salud mental…¡Ni lo dudes!